Volvió a zarpar el Irizar
Diez años después del devastador incendio, el rompehielos volvió a las aguas. El buque partió para verificar sus equipos antes de comenzar las campañas antárticas.
Durante la travesía se exigirá al máximo el rendimiento de cada uno de los sistemas y a principios de octubre realizará teatros en el hielo.
El Irizar cuenta con capacidad para 313 tripulantes y desarrolla actividades logísticas y científicas que le permite realizar tareas de meteorología, química, biología marina y oceanografía, entre otras.
La restauración costó más de 284 millones de dólares pero evitará el alquiler de otros buques preparados para la región antártica.