Nueva terapia contra la esquizofrenia
El principal desafío de la esquizofrenia es la falta de adherencia, se estima que solo el 10% de los pacientes cumple con el tratamiento correctamente. Ya se encuentra disponible en Argentina el primer y único antipsicótico de acción prolongada que se aplica sólo cuatro veces al año. La aplicación trimestral mejora la adherencia, reduce la tasa de recaídas y permite a los pacientes recuperar su capacidad funcional.
La esquizofrenia es una enfermedad del sistema nervioso central que puede afectar severamente la calidad de vida de quienes la padecen y su entorno. Se caracteriza por una distorsión del pensamiento, las percepciones, las emociones, el lenguaje, la conciencia de sí mismo y la conducta. “La esquizofrenia es una enfermedad mental, neuropsiaquiátrica, crónica que se caracteriza principalmente por síntomas como alucinaciones y delirios, que suelen manifestarse entre los 15 y los 25 años” afirmó el doctor Ricardo Corral, médico psiquiatra del Hospital Borda (MN 67.653)
Se estima que afecta aproximadamente al 1% de la población mundial, esto representa más de 21 millones de personas en todo el mundo, y unos 400.000 argentinos. Si bien los pacientes pueden permanecer estabilizados, solo el 10% cumple correctamente el tratamiento lo que afecta directamente la aparición de recaídas cuyas tasas pueden alcanzar hasta el 92%. Si bien se desconoce la causa específica de la esquizofrenia, se estima que influyen factores genéticos y ambientales.
“El deterioro de las funciones intelectuales o cognitivas, la falta de conciencia sobre la presencia de síntomas psicóticos o del déficit o pérdida de facultades mentales, dificultan que una persona con esta enfermedad comprenda las necesidades de recibir tratamiento y de comprometerse con los cuidados que su enfermedad requiere” agregó el doctor Pedro Manuel Sánchez Gómez, Responsable de la Unidad de Psicosis Refractaria del Hospital Psiquiátrico de Álava perteneciente al Servicio Vasco de Salud-Osakidetza y profesor asociado de la Facultad de Medicina de la Universidad del País Vasco en Bilbao.
“Las recaídas son un fenómeno desgraciadamente universal en los pacientes con esquizofrenia. Tienden además a concentrarse en los primeros años de evolución de la enfermedad que son particularmente importantes ya que es entre la segunda y tercera década de la vida donde culminan los procesos madurativos finales del sistema nervioso central. Son los años en los que se afinan y consolidan definitivamente las habilidades necesarias para la supervivencia: las sociales, las interpersonales y afectivas, las laborales, etc. Son además años claves en los que pasan trenes fundamentales para nuestra vida y que difícilmente volverán a pasar: las relaciones de pareja, la red social, la incorporación al mundo laboral,” amplió el especialista.
La intervención temprana y el tratamiento oportuno son fundamentales “La reaparición o empeoramiento de los síntomas son muy frecuentes y cada vez que esto sucede empeora el pronóstico del paciente, ya que en cada recaída hay un deterioro de las funciones intelectuales o cognitivas” agregó el doctor Corral.
Al tratarse de una enfermedad incurable y de tratamiento crónico, la aparición de nuevas y más modernas terapias representan una esperanza para quienes la padecen y su entorno. Recientemente, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó el palmitato de paliperidona de administración trimestral del laboratorio Janssen. El primer y único antipsicótico de acción prolongada que se aplica sólo cuatro veces al año. Este mayor intervalo de dosificación favorece notablemente la adherencia y consecuentemente el control de la enfermedad y sus síntomas.
“La gran ventaja es que estamos seguros que el paciente tiene la medicación que necesita en su organismo, con solo 4 inyecciones al año” confirmó Corral. El paciente puede recuperar su capacidad funcional: insertarse en la sociedad, trabajar, estudiar, recuperar habilidades sociales, interpersonales, afectivas y cuidar de sí mismo con mayor independencia, por lo que también genera un gran impacto en la familia. A su vez, a los profesionales médicos les permite un mejor seguimiento, “como el paciente debe asistir a la consulta para su aplicación, las irregularidades en el tratamiento se detectan inmediatamente” agregó el especialista.
Las terapias de larga duración, al liberar el medicamento antipsicótico de forma lenta y constante en el organismo, han cambiado drásticamente la terapéutica farmacológica en la esquizofrenia. “Permiten que las personas estén expuestas de manera permanente a antipsicóticos que afortunadamente tienen un perfil de tolerabilidad y aceptación por los pacientes mucho más benigno que el de los antiguos fármacos para la esquizofrenia. Esta exposición permanente disminuye claramente el riesgo de recaída” aclaró Sánchez Gómez y coincidió con Corral en que estas terapias “permiten detectar desde el principio el momento en el que el paciente comienza a recibir irregularmente la medicación ya que, en este caso, el paciente falla a las consultas previstas para la administración del tratamiento. Así se puede intervenir precozmente y reforzar al paciente para que siga comprometido con su tratamiento”. El especialista español aclaró también que los pacientes ven positivamente recibir la medicación con menor frecuencia.
El nuevo tratamiento está indicado para pacientes clínicamente estables que están desde, al menos hace cuatro meses bajo tratamiento con la formulación de palmitato de paliperidona de administración mensual. Un estudio de mantenimiento a largo plazo, demostró que el 93% de los pacientes en tratamiento con paliperidona de liberación prolongada, permanecieron libres de una recaída a la finalización del estudio.
“Conseguir una evolución de la enfermedad con un menor número de recaídas determina una enfermedad menos grave en el largo plazo. Esto supone personas con menor afectación de sus funciones mentales y, en consecuencia, más autónomos, menos dependientes, en definitiva, más libres” concluyó el doctor Sánchez Gómez.