Invierno, época de peelings
La temporada invernal es ideal para realizarse este tipo de tratamientos. La Dra. Adriana Fiore (MN 111982) explica todo lo que hay que tener en cuenta para cuidar y renovar la piel del rostro.
El peeling es el tratamiento indicado para renovar la piel en sus distintas capas, con lo que puede ser superficial, medio o profundo. Se utilizan ácidos y el procedimiento debe ser seleccionado por el profesional según el fototipo y las características específicas del paciente. Lo que se hace es descamar la piel en un proceso gradual en función de la remoción y renovación bioestimuladora.
El objetivo es mejorar la calidad de la piel, generar una situación mas homogénea en cuanto al color y borrar pequeñas marcas y arrugas finas. La técnica de pelling puede extenderse a varias sesiones evaluando la situación de cada paciente en particular, pero en términos generales en cuatro sesiones se ve un buen resultado. Desde la primera sesión la piel ya se ve más fina, tensa, hidratada y luminosa porque se trabaja con ácidos y sustancias hidratantes y tensoras. Cada persona tiene su propio tiempo de reacción a pesar de que se utilice la misma metodología. Lo ideal es realizar una sesión por semana e ir evaluando los resultados. Se pueden realizar tratamientos combinados utilizando también radiofrecuencia, mesoterapia, máscaras y apoyos de cremas de fórmula.
Estamos en época de cuidar la piel y protegerla del frío. Hay que pensar que no sólo el sol la daña, también lo hace el frío que la reseca y las resquebraja. Por eso debemos tenerla siempre bien hidratada para generar elasticidad y protección. Esto se logra bebiendo agua en cantidad adecuada y aplicando cremas hidratantes. También hay que usar pantallas y protectores solares sobre todo cuando se está en centros de ski, aunque el cielo esté nublado, porque la radiación pasa igual. El factor a utilizar debe ser como mínimo de protección 50 y en las zonas nevadas un bloqueador total.
Hay que tener en cuenta que este es el momento ideal para cuidar la piel y renovarla. Lo recomendable es realizar un peeling o un mesopeel (mesoterapia combinada con peeling)., sin olvidar la hidratación. Con ello logramos estimular la producción de colágeno, recuperar la elasticidad y obtener así los mejores resultados.