Hepatitis C: el 70% de los afectados no sabe que tiene el virus
Aunque es una enfermedad curable en el 98% de los casos muchas veces tiene un desenlace fatal. El problema más grave es que la mayoría de los portadores desconoce que está infectado. En la Argentina, la Hepatitis C afecta a cerca de 400 mil personas y los especialistas diagraman estrategias para mejorar el diagnóstico a tiempo.
“Tenemos una deuda enorme con respecto al diagnóstico de enfermedad, por lo que una posible solución es su abordaje interdisciplinario. Por eso es importante que muchas otras especialidades de la Medicina conozcan esta enfermedad tan frecuente, silenciosa y dañina. Si el diabetólogo, el reumatólogo o el hematólogo detectan a un portador de este virus, el paso siguiente será su derivación al hepatólogo, que es quien mejor seguirá al paciente en su proceso hacia la cura, pero es muy importante que entre todos trabajemos para encontrar a los pacientes”, sostuvo el Dr. Esteban González Ballerga, médico hepatólogo (MN 78.316), Jefe del consultorio externo de Gastroenterología del Hospital de Clínicas ‘José de San Martín’. En esa institución se realizó el Simposio Universitario de Actualización en Hepatología y Gastroenterología, y entre los temas principales de la jornada, se destacó el abordaje de la hepatitis C.
Son muchas las enfermedades en las que es sumamente importante su detección a tiempo. “Uno puede mencionar por ejemplo al cáncer de colon o la celiaquía, entre muchas otras. Sin embargo, el caso de esta enfermedad hepática es alarmante por lo paradójico, dado que es una enfermedad que se cura y cientos de miles de argentinos no saben que la tienen”, describió el Dr. González Ballerga.
Este virus se transmite por contacto con sangre contaminada y los especialistas recomiendan que toda persona mayor de 50 años se realice el test para detectarlo que consiste en un simple análisis de laboratorio. Esto es fundamental porque aunque no se haya estado expuesto a los factores de riesgo, como compartir jeringas, puede contraerse la enfermedad en forma accidental por una transfusión sanguínea, por una mala esterilización del instrumental médico en procedimientos quirúrgicos o por compartir elementos de higiene personal como cepillos de dientes o afeitadoras. Los instrumentos para la realización de tatuajes o piercings pueden transmitir el virus si no se toman las medidas necesarias, al igual que algunos tratamientos estéticos.
La hepatitis C es una infección que afecta a más de 170 millones de personas en todo el mundo y 7 de cada 10 portadores no sabe que lo es. El virus puede producir una infección aguda y muchas veces es asintomática. Un 20% de los pacientes progresará a cirrosis en los 10 años posteriores al contagio.