SAN ISIDRO: LAS ESCUELAS MUNICIPALES SE PREPARAN PARA EL REGRESO A LAS AULAS
Durante el verano, el Municipio realizó arreglos y obras de infraestructura en los establecimientos educativos para que estén en perfectas condiciones para el 1º de marzo.
En San Isidro ya está listo para el regreso de las clases presenciales en los tres niveles de educación. Durante el receso escolar, el municipio realizó arreglos y obras de infraestructura en las escuelas municipales para llegar de la mejor manera al 1 de marzo.
En el verano, pusieron manos a la obra en los 12 jardines de infantes, la primaria y secundaria de la Escuela Malvinas Argentinas, el Centro de Integración y Cuidado Infantil (CICI) “San Antonio”, y la Escuela de Rehabilitación Integral de Perturbaciones del Lenguaje y la Audición (ERIPLA).
Desde la Secretaría de Obras Públicas indicaron que los trabajos se hicieron para que sean de forma duradera. Van desde la refacción completa de techos, cubiertas, sanitarios hasta la mejora de desagües pluviales, mantenimiento de instalaciones eléctricas y tareas de carpintería y pintura.
“Una educación de calidad no es posible si las aulas no están en condiciones. Por eso, se trabajó para que el retorno a clases sea en un ambiente adecuado”, señaló Marisol Reigosa, directora general de Educación, quien visitó el Jardín Nº 5 “Stella Maris”, ubicado en la calle Diagonal Salta 1230, Martínez.
En ese sentido, de cara al aniversario 50 de este jardín que se cumple este año, la directora Silvia Laczalde expresó: “Estas obras y la vuelta a la presencialidad son los mejores regalos que podíamos recibir. Estamos muy contentas porque los niños y niñas de 3, 4 y 5 años vuelven a nuestras aulas”.
“Teníamos un deseo muy fuerte de que vuelvan las clases presenciales, por eso el municipio trabajó con mucha fuerza para que las escuelas estén en las mejores condiciones. Representa un avance para la comunidad educativa del distrito”, afirmó Macarena Posse, a cargo de la coordinación entre el Municipio, entidades intermedias y vecinos.
Reigosa destacó el funcionamiento de los protocolos sanitarios durante los recuperatorios que se llevaron adelante a partir del 17 de febrero. Y aseguró que el objetivo es que haya la mayor presencialidad posible. Pero aclaró que esto depende sobre todo de dos factores: la cantidad de alumnos de cada institución y los metros disponibles.
En esa línea, recordó que son grupos de 15 alumnos por aula en burbujas sanitarias con una distancia de 1,5 metros. Además, se debe usar tapabocas y el docente tapabocas y máscara.
De cara al inicio de las clases de este lunes 1 de marzo, Reigosa completó: “Los docentes tenían muchas ganas de volver a mirar a los chicos a los ojos, hacer su trabajo sin mediación de una pantalla y empezar la presencialidad después de tanto tiempo de privaciones”.