COLOCABA UN CAÑO Y TERMINÓ CRUCIFICADO A LA REJA
Un hombre que realizaba un trabajo de plomería en altura, terminó literalmente “crucificado” a la reja de la vivienda cuando resbaló la escalera donde trabajaba, cayó y quedó enganchado, de forma dramática, a las púas de hierro que suelen utilizarse como medida de seguridad.
El accidente ocurrió en una casa ubicada frente a la estación de Nuñez durante el mediodía del viernes santo, cuando quiso pasar un caño de termofusión de agua por encima de un paredón de 2 metros de altura.
Sin contar con las medidas de seguridad correspondientes, el hombre de 45 años se subió a la escalera pero cuando la base se deslizó sobre el piso de madera perdió el equilibrio, cayó y quedó colgando de su brazo derecho a las puntas de fierro de la pared.
Su sobrino, que se encontraba trabajando con él, escucho los gritos y fue el primero en auxiliarlo.
Lo levantó por las piernas para que pueda desengancharse y luego le aplicó un torniquete en el brazo para evitar que perdiera mas sangre.
Lo subió a su camioneta y lo llevó a la guardia del Pirovano.
Los médicos que lo recibieron limpiaron la herida y frenaron la pérdida de sangre.
El hombre fue trasladado a la sala de cirugía del hospital para asegurarse que no haya nervios comprometidos antes de realizar la intervención quirúrgica.
El paciente se encuentra fuera de peligro y pudo volver a su casa. Continuará con rehabilitación ambulatoria los próximos días.