Allanamiento a monteros que amenazaban a comerciantes
Se realizaron dos allanamientos en el barrio de Liniers para desarmar a una organización de manteros y vendedores ambulantes que intimidaban a comerciantes de la zona. Si bien en su mayoría eran senegaleses, operaban asociados a un grupo de peruanos. Se secuestró gran cantidad de mercadería y hay 2 detenidos.
Este grupo de manteros había tenido actitudes violentas y peleas con comerciantes. Se instalaban todos los días en los alrededores de la esquina de la Avenida Rivadavia y Ramón Falcón.
A raíz de denuncias de vecinos y comerciantes se comenzó una investigación que terminó con el descubrimiento de dos viviendas que funcionaban clandestinamente como depósitos de mercadería y cocina. Allí se preparaban comidas que luego se vendían en la vía pública en malas condiciones de salubridad. Además se usaban esos lugares como viviendas.
Cuando la policía llegó al domicilio en Pasaje Carpintero, se encontraron con una fuerte resistencia de los senegaleses, por lo cual tuvieron que derribar la puerta, y ya en el interior uno de los manteros lo recibió amenazando con un cuchillo. El lugar es de dos pisos y con varias camas y colchones.
Comenzada la requisa, otro de los senegaleses intentó resistir la entrada de la policía a su habitación, agredió a un policía y debió ser reducido entre cuatro, llegando incluso a romper dos veces los precintos que se le pusieron en las muñecas para inmovilizarlo. El hombre fue detenido por atentado y resistencia a la autoridad.
Simultáneamente, se allanó otro depósito donde esta organización acopiaba la mayor parte de la mercadería. Se trataba de un conventillo de varias habitaciones sobre la calle Ibarrola. En el momento de la irrupción se encontraban en el lugar dos senegaleses y varios peruanos, pero ninguno presentó resistencia. Allí también funcionaba una cocina clandestina donde se preparan alimentos para vender en la vía pública sin la habilitación correspondiente e infringiendo las normas de higiene.
En total se secuestraron 169 bultos con mercadería para la venta, que consistía en juguetes, anteojos, zapatillas, cinturones, bijouterie, gorras, carteras, CDs, ropa, alfombras, sábanas, accesorios para celulares, y las estructuras de metal utilizadas para montar los puestos. Los depósitos fueron clausurados por la Agencia Gubernamental de Control (AGC).
Además, hubo otro senegalés detenido por que según las constataciones de la Dirección de Migraciones tenía una prohibición de ingreso al país, con lo cual se lo arrestó bajó la figura de “desobediencia” .
El operativo estuvo a cargo de Subcomisario Sergio Daniel Herrera , Jefe de la División Contravenciones y Faltas de la Policía de la Ciudad. Interviene en el caso la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas n° 21, a cargo de la doctora Celsa Ramírez.